Ne pas stanger es el documento de un proceso de creación colectiva a partir de improvisaciones del grupo de teatro del Club Antonin Artaud, compuesto por antiguos pacientes del centro psiquiátrico homónimo. En ella, cada autor-actor inventa su propio personaje, su puesta en escena y su diálogo, un largo trabajo que se extendió a lo largo de un año y que dio lugar a una única representación pública. El resultado final no es tanto un documental sobre la enfermedad mental, sino un reportaje sobre la experiencia vivida por los integrantes del grupo.