Michael Snow y Vincent Grenier, dos de los artistas más importantes del cine de vanguardia canadiense, comparten un irónico y reflexivo sentido del humor que involucra al espectador en sus obras. El cine de Snow destaca tanto por su brillante investigación formal como su profundidad intelectual, a partir de la cual explora ideas sobre la imagen, el lenguaje y la realidad. Algunas de sus obras más espléndidas, como Wavelength (1967), definieron la sensibilidad de Vincent Grenier desde el inicio de su creación fílmica. En esta sesión se proyectarán cuatro de las primeras películas de Grenier, que exploran, cada una a su manera, la ambigüedad de la representación cinematográfica, y una de Snow, Seated Figures (1988), una road movie vista desde la perspectiva de un tubo de escape.
Las primeras películas de Grenier presentan un estilo estructural y minimalista centrado en los aspectos técnicos más esenciales del medio: la luz, el diafragma, el enfoque y el desenfoque, como en World in Focus (1976), la pantalla en X (1976), la emulsión y el proyector en While Revolved (1976) y la imagen fotográfica en Intérieur Interiors (to A.K.) (1978). Sin embargo, lo cinematográfico, tal como aparece en su obra, no constituye un objeto fijo y estático, sino que es más bien una apertura a diversas posibilidades de transformación, nos revela ideas complejas sobre las formas y estructuras de la vida cotidiana. Los gestos filmados en la intimidad y la participación del espectador en ellos, los juegos con la ilusión de la imagen tridimensional y la búsqueda de ambigüedades visuales confieren al conjunto de su obra un encanto poético pero distante y un significado filosófico innegable.
En Seated Figures (1988) Michael Snow continúa su investigación sobre la sintaxis del cine mediante una exhaustiva catalogación de todas las posibilidades que ofrece un determinado movimiento o dispositivo cinematográfico. El movimiento de la cámara fue explorado por el artista canadiense hasta el extremo en La région centrale (1971), para cuestionar los supuestos en los que se basaban ciertas teorías sobre el tiempo y el espacio cinematográficos. En Seated Figures la cámara de Snow está montada con el objetivo apuntando al suelo en la parte trasera de un vehículo. Las imágenes en constante movimiento nos transportan por todo tipo de terrenos, desde carreteras de asfalto y grava hasta caminos de tierra y barro, cruzando hierbas, flores y arroyos. Entre la abstracción y la representación, las imágenes se mueven, se detienen y aceleran, y muestran cómo una variedad de superficies y texturas fluye ante nuestros ojos a diferentes velocidades. Escuchamos simultáneamente los ruidos del público viendo la película, voces, toses, bostezos y el zumbido del proyector, lo que crea un efecto de distanciamiento de la experiencia visual que desencadena nuevas sensaciones.
Vincent Grenier: X, 1976, sin sonido, 8’; Intérieur Interiors (to A.K.), 1978, 15’; Closer Outside, 1981, sin sonido, 9’; World in Focus, 1976, sin sonido, 16’. Michael Snow: Seated Figures, 1988, 40’.
Proyección en 16 mm.
Copias de Vincent Grenier procedentes de The Film-Makers’ Cooperative. Copia de Seated Figures procedente de LUX.