yann beauvais comenzó a filmar con catorce años, durante unas vacaciones en Roma y Sicilia. Como estudiante de Filosofía, poco después de ver Walden: Diaries, Notes and Sketches de Jonas Mekas en el cineclub de su universidad, descubrió que lo que le interesaba del cine era la posibilidad de pensar la imagen, por eso transformó la disertación de su maestría en su primera película con texto. Además del formalismo ruso y el estructuralismo minimalista, a beauvais le interesaba especialmente la lógica de la música visual, que aplicó tanto en esta primera película como en varios de sus diarios filmados.
Como otros cineastas franceses de su generación, beauvais confirmó su atracción hacia el cine de vanguardia en 1976 gracias al gigantesco ciclo «Une histoire du cinéma», comisariado por Peter Kubelka para la inauguración del Centre Georges Pompidou. Inspirado por las diferentes prácticas históricas, alternó desde sus comienzos el formalismo con un cine más subjetivo y personal. Sus películas multipantalla tendieron un puente entre estas dos corrientes, en las que encontró las polifonías que luego adaptaría a los trabajos monocanal. También expandió el uso del montaje fotograma a fotograma a sus películas construidas a partir de material autobiográfico, utilizó el texto como imagen en numerosos cinétracts y empleó técnicas propias del collage animado.
Como cineasta, beauvais ha trabajado en súper-8 y 16 mm desde mediados de los años setenta, y a finales de los noventa exploró las posibilidades del U-Matic. Desde 2003, ha realizado más de una veintena de películas en vídeo, en las que ha indagado en el potencial de la tecnología digital (del Mini DV al teléfono móvil). En estos ensayos visuales, algunos en forma de panfletos fílmicos, ha ampliado su vocación activista y sus investigaciones sobre la identidad y la orientación sexual, la crisis del sida, el racismo y el poscolonialismo o la ecología.
En su faceta de distribuidor, beauvais fundó junto a Miles McKane la cooperativa Light Cone en 1982. Ante la situación de bloqueo derivada de las disputas entre las dos cooperativas universitarias parisinas de los años setenta, el Collectif Jeune Cinéma (vinculada a St. Charles Sorbonne) y la Paris Film Coop (relacionada con Nanterre), Light Cone no aspiraba a representar una sola corriente del cine experimental, sino a integrar diferentes puntos de vista para ofrecer una visión de conjunto. Fue así como beauvais y McKane dieron forma a un catálogo que incluyó todo tipo de películas: formales, estructurales, materialistas, autobiográficas, diarísticas o personales, incorporando a su vez el feminismo o los movimientos de liberación sexual. A través de Light Cone, beauvais también propició importantes colaboraciones con cooperativas y festivales de cine internacionales y logró poner en circulación la obra de artistas esenciales cuyos archivos no distribuían sus películas.
Como programador, beauvais comenzó a organizar proyecciones en 1978 en diferentes contextos: primero en las sesiones de medianoche de Adicinex y posteriormente con Scratch, el lugar de proyección creado por Light Cone para visibilizar las películas en distribución o para generar espacios donde exhibir el trabajo de las nuevas generaciones de cineastas franceses de vanguardia. beauvais también trabajó en la difusión del cine experimental francés en el extranjero, realizando largas giras por Estados Unidos, Inglaterra y Nueva Zelanda. Entre los programas más destacados de Scratch se encuentran «Cinéma des Plasticiens», «Défilé: De Film: Re cadré: film comme installation» y «Mot: dites, image». Además, beauvais realizó importantes ciclos como «Musique Film» (junto a Deke Dusinberre) en la Cinémathèque Française, «Found footage» en el Jeu de Paume, «Monter/Sampler : l’échantillonnage généralisé» y «Le je filmé» (ambos junto a Jean-Michel Bouhours) en el Centre Georges Pompidou, «Film and Cities» en Film+ARC Graz Biennal, «Diary Films» en la cinemateca de Bucarest y retrospectivas dedicadas a Andy Warhol y Gregory J. Markopoulos en el American Center de París, donde empezó a trabajar en 1994.
Algunos de estos ciclos dieron lugar a pequeñas publicaciones en las que beauvais desarrolló su escritura y su pensamiento sobre el cine. Igualmente importantes son los libros monográficos que editó dedicados a Paul Sharits, Malcolm Le Grice y, más recientemente, Cécile Fontaine. Los textos de beauvais se han reunido en varias recopilaciones, entre ellas Poussière d’image: Articles de films, 1979-1998 (Paris Experimental, 1998), On Films 1976-1998 (Eyewash, 2021) y Agir le cinéma – Écrits sur le cinéma expérimental (1979-2020) (Les Presses du réel, 2021), la más completa hasta la fecha.