El cine frente a su memoria o archivo es a veces un viaje al lugar de las imágenes para extender su dimensión más política, crítica o trágica. El programa empieza con dos piezas de René Vautier, cineasta militante cuya obra de «agitación social» y en perpetua revuelta sigue el lema de «escribir la historia en imágenes, ¡inmediatamente!». Mourir pour des images regresa a La mer et les jours (1958), una película de Alain Kaminker y René Vogel durante cuyo rodaje Kaminker desapareció en el mar. En Destruction des archives, Vautier camina entre los escombros de sus filmes y archivos destruidos y cubiertos de petróleo por un comando supuestamente enviado por Le Pen. La segunda parte del programa relaciona tres películas que se apropian o reinterpretan filmes canónicos de Eisenstein, Dreyer o Flaherty, respectivamente. Pierre Léon utiliza las imágenes de Iván el Terrible para tratar las agresiones policiales de Montreuil en 2009, por cuyos disparos perdió un ojo el joven cineasta Joachim Gatti. Ramiro Ledo relaciona los planos de Antonin Artaud en La pasión de Juana de Arco con las actas de su expulsión del grupo surrealista. En su nueva película, Kowalski deconstruye Louisana Story (producida por la Standard Oil) y, partiendo de imágenes extraídas de Internet, denuncia el vertido de petróleo que tuvo lugar en el golfo de México en 2010. Según el cineasta, se trata de una pieza de «cine-graffiti»: «Pintas encima de un filme previo, escribes en él y lo echas a perder en el contexto histórico.» [Proyección en vídeo.]
Mourir pour des images, René Vautier, Francia, 1973, 40 min; Destruction des archives, René Vautier, Francia, 1985, 10 min; À la barbe d’Ivan, Pierre Léon, Francia, 2010, 10 min; O proceso de Artaud, Ramiro Ledo, España, 2010, 10 min; The End of the World Begins with One Lie, Lech Kowalski, Reino Unido, 2011, 60 min.