Miramos al sol directamente a los ojos con música en nuestros oídos. La pista, de Attwenger, es una letanía que explica un día caluroso durante el cual miramos fijamente al sol hasta que todo se vuelve de color rojo y el brillante cuerpo celeste parece una pistola o un ojo. El vídeo consiste en una docena de planos estáticos con muy poco o ningún movimiento.