Kenneth Anger hace nacer de sus fantasmas un cine-magia que procura al espectador una experiencia sensorial y física única. En ese recorrido de lo onírico a lo mítico que es su corta obra acabada, en la que conviven elementos de la cultura popular con ciertos valores contraculturales, la sexualidad aparece, como en tiempos paganos, de la mano de lo sagrado, mientras que la violencia incendiaria deviene un rito sublime. Una orgía dionisíaca en la babilonia hollywoodiense en honor de Lucifer, ángel de la luz y patrón de su cine, para celebrar la era de Acuario.
Kenneth Anger: Fireworks, 1947, 14’; Scorpio Rising, 1963, 29’; Inauguration of the Pleasure Dome, 1954-66, 38’; Invocation of My Demon Brother, 1966-69, 11’; Lucifer Rising, 1966-80, 29’.
Proyección en 16 mm.
Copias procedentes de Cinédoc Paris Films Coop.